Vos que aquella madrugada festejaste el voto No Positivo a la 125, no me vengas a romper los huevos con el aumento de la carne. Si, si, no me mirés con esa cara de perro que lo están culeando, como si una cosa no tuviera que ver con la otra. Ahora tilingo que putéas porque el bife en la plancha, es cada vez más chico, jodete. Ahora que usas un puchito de carne picada, para darle gusto al guiso, y ahí nomás; te digo como dijo el Diez: “vos también la tenés adentro”.
No me cambiés de tema, con eso de “¿qué diez?”. Sabés de quien te estoy hablando. Si, no te hagas el boludo. Ese negrito que te hizo llorar con sus goles, y que al primer trastabillo te sumaste al pelotón mediático de fusilamiento.
No, no, no. No nos vayamos por las ramas. Vos viniste con esto de la carne y ahora me tenés que aguantar. No, no me digas que no tiene nada que ver. Vos aquella madrugada festejabas y estabas tan exaltado como nunca. Así debiste estar el día que recuperamos la democracia, y sin embargo con indiferencia asegurabas que se veía venir. Vos festejaste aquella madrugada, bueno ahora jodete.
Aquello fue como un polvo al vuelo, mal echado, con la complicidad de la trampa, y ahora vienen con que un pibe es hijo tuyo. Te la tenés que aguantar.
Te acordás, cuando me hablabas de los bolsillos de la gente de campo, y yo te contestaba que no la estaban entendiendo. Que aquello era una medida protectora hacia otros cultivos, y hacia la ganadería misma. Te cagaste de risa mal en la cara de muchos.
Miles y miles de hectáreas, perdió la ganadería a manos de la soja. Sí, sí, la ganadería, no los ganaderos. La mayoría ahora son sojeros.
Ahí tenés el resultado de la 125, ahí lo tenés. Ahora que te quejás por el precio de las milanesas, vos que estabas tan contento aquella madrugada, te vas a tener que conformar con la milanesa de Zambayonny.
Te la tenés que aguantar.
Libertad para la soja, libertad. Ahí la tienen. A causa de esto la mayoría se aleja del negocio ganadero, o simplemente lo va achicando. ¿Y qué obtenemos? Menos oferta y por consiguiente el aumento de los precios. No, no, no me vengas con eso de que economía soy un cero a la izquierda. Eso ya lo sé, no hace falta decirlo. Pero tampoco me vengas con eso de que los productores pueden hacer lo que les dé la gana. Dejá que sigan eligiendo qué producir y que no, y vas a ver cómo te va a ir a vos. Vas a terminar comiéndote esos deformados pekineses que tenés por perros.
Así que no me vengas a romper los huevos con el aumento de la carne.
Vos que aquella madrugada festejaste el No Positivo a la 125, de parte del deformado de Cobos, te la tenés que aguantar.
3 comentarios:
Sabias palabras, compañero. Sabias palabras. Que se jodan los tilingos. Pero, como siempre ha pasado, estos hijos de puta no se joden solos. De pasada, nos joden al pueblo también.
Que le vayan a reclamar a Bobos o a Minga Deangeli.
Esto es algo que el gobierno debiera salir a decir. Cuál es la verdadera causa.
Cacerolos infectos
Rudy: tilinga no, mas bien jubilada pero como carne, a Dios gracias! Lastima que los tilingos conchetos (mira si sere vieja, con esa palabrita!)nos revientan a los que seguimos peleando para seguir creciendo y tratando de salir del berenjenal que nos dejaron los golden boy, las alianzas rejuntadas tipo cambalache. Donde andan dibujando ahora, gente con talento? Se imaginan lo que serian los monologos de Tato Bores? Guauuuuu
Nos seguimos... yo escribo, no tan lindo como Uds. pero todavia pienso, recuerdo, no bajo mis banderas...
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