Otra joyita de Barone

martes, 14 de julio de 2009 ·

Extracto de una columna de la revista Debate. Con qué claridad escribe Barone.
... no quisiera meterme en Honduras. Ya es bastante con la mesa de Mirtha Legrand. Esa mesa es capaz de quitarle profundidad al vórtice del “Infierno”, de Dante. Algunos, con méritos profundos, se sientan allí y se vacían sin darse cuenta. La dama anfitriona tiene tanta inimputable capacidad de vaciamiento que si a esa mesa se sentara, pongamos, Umberto Eco, de él solo quedaría un eco insignificante y efímero. En esos almuerzos, hasta se lograría superficializar a la tragedia griega y al Holocausto. Hay invitados que se muestran tan lábiles al menú que acaban mimetizados con la nada y sin necesidad de esforzarse. Leonardo Favio, después de ver a Felipe Solá en esa mesa, callado y sonriente cuando “la señora” decía que lo de Honduras no le importaba nada, decidió borrarlo de todas las menciones de agradecimiento que figuran en las copias de su película Aniceto. No sé si se merece tanto; a lo mejor, si Favio mantuviera el nombre de Solá en los créditos, la gente lo pasaría por alto como si no existiera. Es lo que hizo con él Jaime Durán Barba. A Felipe Solá lo terminaron de desvanecer sus socios, le chuparon la marca peronista y la “tinellizaron” por cuenta propia. Lo que le quedó ahora es un limbo. Limbo que la Santa Iglesia ha abolido...


0 comentarios:

Secuaces

Peronachos

PJDigital.org

Portal de Noticias

En Sintonía